- Mientras más restrictiva y monótona es la dieta, más difícil es seguirla el tiempo necesario para bajar de peso. Luego de un tiempo la persona siente necesidad o la tentación de consumir alimentos con altos contenidos de azúcar y grasa.
- Trata de que todas tus comidas incluyan una porción de ensalada como guarnición.
- Come mucha fruta y verdura. Lo mejor es aprovechar las de estación. ¡Estarán frescas, sabrosas y económicas!
- Tu nutricionista te puede asesorar, pero elegir cada día alimentos saludables está en tus manos.
- La leche y todos sus derivados (yogurt, quesos, etc.) contienen el calcio que te ayudará a prevenir la osteoporosis. Intenta consumir productos lácteos descremados.
- En restaurantes italianos, elige pastas o pescados con tomate y oliva. Trata de evitar platos con abundante cantidad de queso, crema o carne.
- Es importante que recurras a un médico especialista si quieres bajar de peso. De acuerdo a tus características, el profesional es quien sabrá indicarte qué alimentación es mejor para ti.
- El desayuno es la comida más importante del día. Nunca dejes de hacerla. Es la que te aportará energías para comenzar un buen día.
- Cuando comiences a realizar actividad física, ármate un cuaderno y anota el tipo de ejercicio, la duración y la frecuencia.
- No puedes cambiar todo de repente. Por eso, te sugerimos que cada día cambies un hábito malo por uno saludable. Es una buena manera de arrancar.
Fuente: www.fat-fit.com.ar Dra. Mónica Katz